lunes, 12 de septiembre de 2016

Va llegando la primavera a este cuerpo de invierno.

el año del mono


Ludovica Squirru destaca que cada ciclo está regido por un animal que representa valores, fortalezas, decisiones y oportunidades. En el caso del mono de fuego, la astróloga asegura que significa combate desde una perspectiva de canalización, de ir contra la corriente de lo negativo y las adversidades, de las guerras y el egoísmo.
“El año del mono viene con un espíritu de tomar decisiones, es un signo de energía fuerte. Para los chinos, el mono de fuego significa incendio, pero también porque trae la luz sagrada, iluminación. Todo tiene que ver cómo te preparas, en la astrología no hay cambios mágicos, hay una conciencia que debemos adquirir en épocas de una gran oscuridad (…) Nadie te va a solucionar la vida si no haces algo por ti mismo”.

Oh! cuántas palabras, muchos gestos , actos, para nombrar lo innombrable: una lucha cuerpo a cuerpo, un año espantoso está pasando esta mujer, las decisiones las tomó, ¿fortaleza? la tiene, y de sobra, aunque a veces por las noches se a haga chiquitita en su cama, tratando de protegerse contra las fuerzas del afuera. Es como si el mono con su energía le robara la comida, o le pusiera trampas, o se riera de ella.
A fuerza de pelear la vida, esta mujer escribe, escucha, canta a escondidas, se prende a una telenovela que le gusta, la historia biográfica de una gran cantante de salsa, y en esa telenovela hay salsa, azúcar, lentejuelas, plumas,  por momentos se vuelve lectora, desesperada lectora en los colectivos, y busca novelas o cuentos atrapantes que le hagan pasar los largos tiempos de desplazamiento. En las vacaciones de julio se volvió hacia su niña interna y se permitió jugar a las muñecas ( cómo sería de tremenda  la batalla externa que vivía esta joven mujer,  que ha tenido que volver al mundo de la infancia, a su ternura, al cuidado y la mirada de una madre ya que no está). Barbie resurgió de una caja olvidada, se desnudó y quedó despojada, en pleno invierno. Su dueña, la tomó nuevamente y le creó un sweater de lana de llama para abrigarla, y le puso un jean, y ahí la mujer encontró un camino de ternura hacia un ser que no tiene alma, pero que sonríe desde su cara de plástico.https://es.pinterest.com/lauramariacamar/barbie-la-poup%C3%A9e-rev%C3%A9e/
(evidentemente no puedo ilustrar el relato con las bellas fotos de Barbie, pero  están ahi, dando vueltas por Instagram o Pinterest).


pleno verano,  con los viejos de la Justa.



Esta mujer tiene muchas pero muchas ganas de llorar, por lo que le pasa, por que no puede solucionar algunas cosas de su vida, como su salario por ejemplo, En el trabajo no le pagan desde hace diez (si diez) meses, cosas de la burocracia,  causa de un retraso de papeles, y ella sufre y mira todo lo que pierde diariamente, y va a trabajar calladita y con onda , les da las clases a sus alumnos viejos con la mayor de las alegrías y el profesionalismo ,mientras constata cómo en su cabeza las canas aparecen entre el pelo oscuro,y así todos los días, prepararse, trabajar, sonreir sin ganas, volver a casa, seguir limpiando y escuchando a su familia. dormir.
Lentamente va llegando la primavera a éste cuerpo de invierno, el de una mujer que ha sufrido mucho en cada uno de los días de éste invierno, y que sin embargo ha hecho un enorme esfuerzo por jugar, por mantener la risa, por volcarse  a la poesía. Esta mujer se ha dejado atravesar por lanzas de frío y también de felicidad . Dejá que te envuelva la primavera, dejá que el Mono baje del árbol, animate a mirarlo bajar, siendo fuerte, Laura. Y sé fuerte Laura, todo va a pasar, ya vas a ver.